martes, 23 de febrero de 2010

Carta a una mujer de 22 años (primera parte)

De: Martha Itzel de 25 años.
Para: Martha Itzel de 22 años.

Hoy me desperté llorando. Las lágrimas venían de un sueño en el que yo estaba sola y rodeada de personas. Esos momentos en los que la soledad está adentro de nosotros y no importa cuantas personas estén con nosotros. Acompañándonos.
Me desperté preguntándome
¿Qué es el amor?
¿Por qué me siento tan sola cuando no está junto a mí el hombre al que amo?
¿De dónde viene el miedo a expresar los miedos?
Pensé que me gustaría viajar en el tiempo y visitarme a los 22 años para decirme… -no tengas miedo, habla honesta_mente y expresa lo que piensas y sientes. Siéntete bien y sé feliz. Para eso no tengas miedo de decir o hacer lo que necesites o haga falta para que todo sea un aprendizaje, un viaje agradable y lleno de amor.
Meditando antes de dormir, pensé que realmente podría hacer ese viaje. Mientras lo logro, preparo todo lo que quisiera decirme en una carta. Así cuando me encuentre… me dire:


Cuándo no sepas que hacer, no hagas nada. Busca el silencio, Quédate quieta. Escucha tu respiración. El silencio interior te irá dando respuestas. Que tu respiración sea larga y profunda. Puedes contarla al principio. Te ayudará.

No tengas miedo. Entrégate y ama sin temor. La honestidad es la clave. Clave de partida para vivir libremente. La responsabilidad es la compañera inseparable de la honestidad y la libertad. Cuidando_te a ti, cuidarás a todos tus compañeros.
Contacta con tus emociones y sentimientos. Exprésalos clara_mente. Escribiendo. Bailando. Hablando (sola o con alguien) (o entre muchos) sólo recuerda… claridad.

viernes, 12 de febrero de 2010

La historia de un...

La Ciudad de México en el 2010 tiene frío. El sol sale desde muy temprano. El viento sopla fuertemente y despeja el cielo. Descubre a la mujer dormida, desnuda con la piel blanca y un hombre a sus pies.
Voy en bici hacía mi trabajo y mientras cruzo un puente, los árboles hermosos bailan movidos por el viento. La gente camina a prisa. Los coches atiborran la Ciudad de cláxones y luces rojas. Los perros salen a buscar alimento en la basura que sacan las personas por la mañana. Los niños ya están en la escuela prendiendo de la vida. Creciendo y conociendo. Este mundo. Esta tierra.
Toda esta película sólo una cosa tenía de malo: no estaba él. Esa película la estaba viendo sólo yo y pensé… -no importa- sacudí mi cabeza antes de que mis lagrimas rodaran por mi cara guiadas hacía abajo por la gravedad -cuando veo los árboles bailar, lo veo a él- puedo sentir el viento y voltear hacía atrás sobre mi hombro para verlo mientras sigo pedaleando. Lo veo asomarse por el balcón y me despide. Se queda ahí mientras yo me alejo en bicicleta sintiendo al sol. A él.
Él viendo la Ciudad despertar, se mete para ir a la oficina y prender la computadora. Se pone a trabajar.
Yo, sigo rumbo a mi trabajo sonriendo por que sé que voy a regresar y los dos habremos trabajado, visto el cielo y sentido el aire.
Sé que está vivo y eso me permite seguir, llegar a mi destino. Entro a las oficinas y saludo a todos. Comienza un nuevo día, un día que siento como si fuera un mes cuando no lo veo.
Qué pasaría si él estuviera muerto?
Me he pasado 25 años de mi vida buscando a este hombre. He buscado a mi media naranja. He soñado con el hombre perfecto. Ahora me dije que ésta, era mi misión, volver a estar con él.
Me equivocaba. Encontrarlo no era el objetivo de mi vida, sino un incidente imperativo.
Encontrarlo a mis cortos 22 años ha permitido que mi vida comenzara. Ahora el objetivo de mi vida es: mmm…???
Qué voy a aprender de el amor?
Se acerca el 14 de febrero y he cambiado tanto. Recuerdo a Martha Itzel hace 2 años. A chispita hace 1 año. Ahora soy una mujer de 25 años del 2010 y esto apenas a comenzado.
Por que creo que las historias de amor, en la realidad, no lo que nos dicen las películas antes de aparecer los créditos. Tampoco lo que dicen los libros cuando llegamos al famoso “The end”.
En la realidad, las historias de amor, no tienen finales.

...infinito amor.

miércoles, 3 de febrero de 2010

GRACIAS POR LA MÚSICA

Porqué un amigo te regala un disco???
Por qué un amor te regala una canción???
La música me ayuda a expresar lo que mis palabras no describen, lo que mis emociones embrolladas no aclaran, lo que otra persona me mueve y me conmueve. Ante eso sólo puedo decir GRACIAS!!!
Por permitir que mis sentimientos bailen al ritmo de ese disco, por ayudarme a sacar eso que tengo atorado y que no sé como liberar, por abrirme el panorama hacía otras notas y otros tiempos. Por llevarme a dimensiones que no conocía y ahora exploro. Pensando en ti. Recordándote. Extrañándote. Sintiéndote.
De ahora en adelante signifique lo que signifique, represente lo que represente, me acompañe a donde me acompañe y la comparta con quien la comparta, esa música siempre me la habrás dado tú. Por eso GRACIAS!!!
ALEJANDRO, CÉSAR, OSFABEL, DAVID, BERNARDO, OSCAR, ANALÍA, ADRIANA, MARCO, MARTHA, ABIGAIL, ARLEM, JOSUÉ, IRBING, FRANCISCO, ANGÉLICA, FAUSTO, MAGA Y SOBRE TODO Y OTRA VEZ, A TI. GRACIAAAAAAAS!!!