jueves, 2 de febrero de 2012


Discutíamos. Tú parado, recargado en el marco de la puerta y fumándote un cigarro. Bebías el líquido de tu vaso que rellenabas más rápido de lo que tus palabras salían. Yo te admiraba, te contemplaba, te disfrutaba y discutía.
No discutía por discutir. Discutía para acordar. Primero liberar, sacar, negociar y luego acordar. Acordar para aprender, crecer y al final llegar. Llegar a esos momentos en los que repetidamente nos diremos GRACIAS!!! Gracias por estar y no dejar pasar. Gracias por impulsarme. Gracias por enseñarme y acompañarme. Gracias por crecer conmigo, junto a mí y amarme. Por todo. Absolutamente todo. Gracias siempre.

No hay comentarios: