sábado, 12 de agosto de 2017

Un cuento de 100 palabras



Le apretó el cuello con fuerza hasta que ella dejó de respirar.  Sobre su cuerpo inerte él conservaba aún la sensación de placer.  Era una satisfacción que le recorría las manos hasta la cabeza, no sabía si por la muerte o el orgasmo.

Había sido la mejor noche de su vida, una cena cálida, caminata nocturna por la alameda acompañada de una plática profunda. Esa noche se ofrecieron con honestidad, desnudaron su consciencia con bondad. El acuerdo era decirse todo.

Ella lo amaba como a nadie, creía que él debía saberlo y fue honesta pero, él no lo pudo soportar.


Mar

No hay comentarios: