martes, 11 de agosto de 2015

Cuando una mujer despierta.


He llorado al perder a un amante. Me he despedido con lágrimas, danzas y orgasmos de otros y con otros hombres.

He llorado al despedirte porque sentí que te perdía. Sentí que perdía a mi compañero de idas y venidas. Mi compañero no solo en lo sexual, también del arte de amar y otras aventuras. Sentí que te perdía y me perdía.

Después de mucho llorar descubrí que no me encontraba en la soledad, que no estaba siendo abandonada y que no perdía. Al contrario, descubro que me encuentro en la oportunidad de recuperar un espacio, y sólo se lo daré al hombre que esté dispuesto a amarme así. Así como soy.

Porque para amarnos tendríamos que atrevernos a salir de lo cómodo. Para amarnos hay que impulsarnos, motivarnos e inspirarnos. No sólo complacernos. En mi amor no hay límites para el amor. En mi amor no hay miedos para compartir. En mis miedos no hay monstruos que no conozca ya. En mis monstruos no hay encuentros sin conciliación. En mi amor hay espacios para la negociación y los acuerdos. Mi amor es un espacio para entregarnos, para encontrarnos. Encontrarnos con otros miedos y otros monstruos, con otros amores, sabores y olores.

Si lo que quieres  es una vida sin confrontaciones, sin retos y empujones. No soy yo con quien debes estar, e hiciste bien al regresar.

Conmigo entraríamos a nuevos territorios no explorados y sin referencia. Juntos transformaríamos cada camino en una mundo de crecimiento y fuerza. Para estar conmigo hay que involucrar más allá de la piel. Yo involucro los órganos, las vísceras, los olores y fluidos que dentro de mí, pulsan.

Para seguir una vida cotidiana es mejor que estemos lejos. Sí quieres mojarte sólo los pies entonces salta mis olas y sortea mis mareas. Yo estoy dispuesta a empaparte salvaje y amorosamente con mi mar y amar.

Es más fácil regresar y amar a una mujer que no se atreve, que no conoce sus poderes y que mucho menos los compartirá con otras mujeres. Amar a una mujer dormida no te convertirá en leyenda. No será un reto para ti. No te hará moverte y no te incitará cuando estés cansado para que despiertes y te transformes.

Si lo que quieres es una mujer que camine tomándote de la mano, acompañándote en tus sueños, metas y rumbos. Si lo que quieres es a alguien a tu lado para servirle a tu ego. Si así realizas tu papel de hombre viril. Si eso es suficiente para ti… entonces te felicito por haberla encontrado. Les deseo que su amor siga creciendo y que siempre se acompañen y se agradezcan ese camino juntos. Ese camino, suave, cómodo y  sin amenazas. Celebro su amor y su felicidad.

Con esto sólo dejo en claro que cada uno a tomado una decisión importante.

Yo decido seguir creciendo y despertando. Quiero y busco que en cada amor haya un cambio en mi vida, que no me deje quedar en mi zona de confort todo el tiempo. Quiero amar y soltar viejos conceptos. Claro está que para eso necesitamos coraje, valentía, voluntad, Abandonar los miedos y prepararnos para los nuevos. Formar nuestro camino con amor y cuidado para dar pasos firmes, seguros y llenos de confianza, aceptación, magia, luz. Quiero escuchar palabras que enriquezcan mi alma, aún que a veces esas palabras duelan. Emociones que conforten mi corazón pero que lo inciten y lo exciten. Llamas que enciendan mi vida y que no me dejen ser la misma.

Soy una mujer que elige amar y despertar. Volar a tierras lejanas, espacios nuevos y explorar otros universos.

Soy compañera, cómplice, amiga, alumna maestra. Me gusta tomar de la mano y compartir nuestras vidas, nuestros sueños y nuestros deseos. Me gusta amar y que me amen. Me gusta dar y recibir. Adoro este arte de vivir con sus hermosas y crueles emociones que conlleva.


No hay comentarios: